"LAS MUJERES SON POTENTES".

"EVOCANDO AMOR POR ELLA".

 
.- Mi madre también mi esposa.
Son dueñas de mi presente.
Son tiernas como las rosas...
Las amo y son inocentes. 

Mi esposa es más potente.
Es muy dulce y cariñosa.
Se aplica muy dócilmente...
Al ser bella y generosa.

Me cuentan que es peligrosa.
Porque mira fijamente.
Es morena y valerosa...
¡No busca más pretendientes!.

Hay casos que están pendientes.
Hay litigios por un huerto.
Es algo muy sorprendente...
Lo heredó de un tío muerto.

¡Amores como es el nuestro!.
No se pueden comparar.

El amor aún no esta muerto...
Si se encuentra al despertar.

Hay momentos para amar.
Y olvidar viejas heridas.
Nunca hay que lamentar...
Las caricias más queridas.
 
Sólo dos hay en la vida.
El de una madre y la esposa.
Tenerlas muy bendecidas...
Y alegres como dos rosas.
 
Mujeres maravillosas.
Aguantando este proceso.
Son muy lindas y graciosas...
Y con ellas quedo preso.

 
Cuantas veces a mi regreso.
Me entusiasma su mirada.
Para mi; es un tierno queso...
Si la veo enamorada.
 
De la noche a la mañana.
La veo preciosa y la admiro.
Entra el sol por la ventana...
Y me enclaustro en mi retiro.
 
A veces cuando le miro.
Siento celos del espejo.
Ella cree que estoy dormido...
Porque ronco como un viejo.
 
Soy joven; y algo pellejo.
Con ella soy muy decente.
Aunque a veces corro el riesgo...
De engañarle con la gente.
 
Tan callada y tan ausente.
Es divina y generosa.
Quiero gritarle a la gente...
Que para mi es preciosa.
 
Aplicada y orgullosa.
Llena está de sentimientos.
Entre otras mucha cosas...
Siento un gran remordimiento.
 
Palabras que atrae el viento.
Con la fragancia de rosas.
Que enarbolan pensamientos...
Por que es bonita y hermosa.
 
Mis noches son muy gloriosas.
Su cuerpo es una escultura.
Las noches son muy viciosas...
Ella es potente y la apura.

La vida se ha vuelto dura.
Mis celos se tranquilizan.
En los actos me murmura...
¡Que me mueva; tiene prisas.

Tranquila con su sonrisa.
Tras un rato ella comienza.
Ya no hay tiempo para risas...
Yo me rindo mientras besa.

No me habla ni conversa.
Me quedo desprotegido.
Harto de vino y cerveza...
Al final caigo rendido.

Estoy loco y sorprendido.
A este paso ella me mata.
Yo siempre he correspondido...
¡El matrimonio me ata!.

Ella es la que siempre ataca.
Alguna noches me llora.
Entre pucheros y matracas...
Con abrazos me enamora.

"Guti"."El Romancero".