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.- Espero a mi tierno amante.
Mi Manolo el castellano.
Era tierno y muy galante...
Siendo hermoso era humano.
Con su pelo bello y cano.
Con su calidad de hombre.
Pero siempre calentamos...
Con su figura y su nombre.
Era alto y fuerte el hombre.
Precioso una poesia.
Todas comprarian su nombre...
¡Amandome lo decia!.
Muy orgulloso queria.
En la cama era una tropa.
Trabajaba en la Herreria...
¡Le sacaron una copla!.
Aquí espero con dos copas.
A mi antiguo pretendiente.
Me he puesto muy poca ropa...
¿No se si yo soy prudente?.
Es un hombre inteligente.
¿Captará esta ironía?.
Con esta forma indecente?...
De vergüenza moriría.
Ya me dijo al medio día.
Que agradecía mi belleza.
En el fondo maldecía...
Que triunfara la tristeza.
Y pasó por mi cabeza
El extremar mi vestido.
A mi antiguo pretendiente.
Me he puesto muy poca ropa...
¿No se si yo soy prudente?.
Es un hombre inteligente.
¿Captará esta ironía?.
Con esta forma indecente?...
De vergüenza moriría.
Ya me dijo al medio día.
Que agradecía mi belleza.
En el fondo maldecía...
Que triunfara la tristeza.
Y pasó por mi cabeza
El extremar mi vestido.
No soy de la realeza...
Me gustan los pervertidos.
¿En que se habrá convertido?.
Sólo bebia limonada.
Iba siempre bien vestido...
Me gustan los pervertidos.
¿En que se habrá convertido?.
Sólo bebia limonada.
Iba siempre bien vestido...
¡Pero de mujeres nada!.
De mañana dos ensaimadas.
Se las llevaba a la cama.
Nunca se vieron variadas...
¡Ay Manolo tengo ganas!.
Cierro puerta y las ventanas.
La noche fiel con su manto.
Con traje grueso de pana...
Espero yo mientras tanto.
Siempre hablará su encanto.
Su hombria y su galladia.
Por la noche era de espanrto...
¡Hasta me perdía de día!.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.
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