.- Entre mentiras y apaños.
Nuestro País llega tarde.
Acostumbrado al engaño...
Las leyes salen de balde.
Yo digo que el bosque arde.
Por pirómanos estables.
¡Por hijos de puta madre!...
¡Son bordes y poco amables!.
¿Cuánta gente pasa hambre?.
La que hoy vive angustiada.
Cada día hay más fiambres...
Las personas están marcadas.
Las personas están marcadas.
La juventud esta amargada.
Los políticos que entiendan.
¡No hay leyes y no hacen nada!...
Son corruptos sin enmienda.
Sin empleo y sin vivienda.
Con vergüenza por la calle.
Van pidiendo por las tiendas...
En cualquier lado los halle.
La sociedad que no falle.
Que dejen su lotería.
Que voten con más detalles...
¡No hagan mercaderías!.
Familias en su agonía.
Por culpa de este Gobierno.
Banqueros con su alegría....
¡Se pueden ir al infierno!.
Familias y niños tiernos.
Viviendo en pisos en venta.
Sin luz ni agua en invierno...
Como ocupas en las trastiendas.
Empresarios en sus viviendas.
Con coches caros y lujosos.
Son dueños de grandes tiendas...
Con sus impuestos dudosos.
Con sus negocios suntuosos.
La mayoría con queridas.
Se sienten muy orgullosos...
Con su conciencia dormida.
Con suntuosas comidas.
Con cenas donde se hallen.
La sociedad queda herida...
Pasan hambre por la calles.
Los políticos que callen.
Los de Euskadi y los murcianos.
Andaluces y catalanes...
¡Son corruptos y son enanos!.
Mujeres niños y ancianos.
Son hombres como castillos.
Inmigrantes y paisanos...
Van viviendo su castigo.
¡Diez millones son testigos!.
Llevan una vida dura.
Ellos saben lo que digo...
¡Terminan su sepultura!.
Fallecen más criaturas.
Los políticos que entiendan.
¡No hay leyes y no hacen nada!...
Son corruptos sin enmienda.
Sin empleo y sin vivienda.
Con vergüenza por la calle.
Van pidiendo por las tiendas...
En cualquier lado los halle.
La sociedad que no falle.
Que dejen su lotería.
Que voten con más detalles...
¡No hagan mercaderías!.
Familias en su agonía.
Por culpa de este Gobierno.
Banqueros con su alegría....
¡Se pueden ir al infierno!.
Familias y niños tiernos.
Viviendo en pisos en venta.
Sin luz ni agua en invierno...
Como ocupas en las trastiendas.
Empresarios en sus viviendas.
Con coches caros y lujosos.
Son dueños de grandes tiendas...
Con sus impuestos dudosos.
Con sus negocios suntuosos.
La mayoría con queridas.
Se sienten muy orgullosos...
Con su conciencia dormida.
Con suntuosas comidas.
Con cenas donde se hallen.
La sociedad queda herida...
Pasan hambre por la calles.
Los políticos que callen.
Los de Euskadi y los murcianos.
Andaluces y catalanes...
¡Son corruptos y son enanos!.
Mujeres niños y ancianos.
Son hombres como castillos.
Inmigrantes y paisanos...
Van viviendo su castigo.
¡Diez millones son testigos!.
Llevan una vida dura.
Ellos saben lo que digo...
¡Terminan su sepultura!.
Fallecen más criaturas.
Y los ancianos que encarte.
Los ricos de otra anchura...
Aguardan sin que te encantes.
¿Dios está en todas partes?.
Siempre ayudando al más rico.
Los ladrones por delante...
Son banqueros con buen pico.
Como pobre lo critico.
¡Nunca se amparado al pobre!.
Las Religiones es un circo...
Reciben dinero y sobres.
Los políticos que sobren.
Son muchos y no hacen nada.
¡Sin trabajar que no cobren!...
Son corruptos en manada.
La sociedad esta alarmada.
En muchas invocaciones.
En el Congreso llamadas...
Con cientos de discusiones.
¡Dios esta de vacaciones!.
Ninguno pide perdón.
Entre envidias y traiciones...
¡Encabritan la razón!.
Todos sacan su pendón.
Los pensionistas les gritan.
Sus razones y su dolor...
¡Sus peticiones marchitas!.
Los ladrones por delante...
Son banqueros con buen pico.
Como pobre lo critico.
¡Nunca se amparado al pobre!.
Las Religiones es un circo...
Reciben dinero y sobres.
Los políticos que sobren.
Son muchos y no hacen nada.
¡Sin trabajar que no cobren!...
Son corruptos en manada.
La sociedad esta alarmada.
En muchas invocaciones.
En el Congreso llamadas...
Con cientos de discusiones.
¡Dios esta de vacaciones!.
Ninguno pide perdón.
Entre envidias y traiciones...
¡Encabritan la razón!.
Todos sacan su pendón.
Los pensionistas les gritan.
Sus razones y su dolor...
¡Sus peticiones marchitas!.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.- Guti.
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