"LA HISTORIA DE MARIA LA PONDERÁ".

"MARÍA LA PONDERA"

"Aquí comienza una historia;
de guerrillas y de guerras,
muchos ya están en la gloria...
Otros ya están bajo tierra.

María una jovencita;
era honrada y muy preciosa,
que de verla uno se irrita...
Es cachonda y muy hermosa.

María tuvo su amante;
pero él se fue a la guerra,
sólo fue un puto tunante...
Con su camisa y guerrera.

De aquellos de los de fuera;
con los Pérez y los Sanchez,
los Velascos y Riberas...
Y algunos que son muy guaches.

Ella quedose muy sola;
pero un amante quisiera,
sólo su amiga Bartola...
Con cien hambres y miserias.

Más aquellos buenos mozos;
también cogieron y marcharon,
y a la vez hubo destrozos...
Y a pocos se lo achacaron.

Ella pactó con amiga;
una que hacia de ramera,
con ella hizo buenas migas...
Era puta tempranera.

Mirándola que es tan puta;
pero de buena conciencia,
no roba tampoco hurta...
Más tiene fe en sus creencias.

Que quien manche por su estado;
hable mucho sin modestia,
que tome bien sus pecados...
Que convenga a su conciencia.

Pasaron más de tres años;
tres vidas, con muchas penas,
pasó por cientos de daños...
Pero siguió de ramera.

¡¡Ay con la pobre María;
mientras lloraba sus penas,
más ella también sufría...
Sin fiestas y sin berbenas.

Sabiendo que gusto daba;
y conque sabia paciencia,
uno tras otro acababa...
Poniendo sabia experiencia.

Lo hacia con mozos tarados,
también con viejos babosos,
Muy heridos y herniados...
Y buarros asquerosos.

Con muchos cojos y mancos;
más con ciegos ya quisiera,
lo hacia en rusticos bancos...
De aquellos que son madera.

Muchos casi no volvieron;
más muy pocos regresaron,
y aquellos que no quisieron...
Esos nunca progresaron.

¡¡Ay con la pobre María;
que solita que te quedas,
sabias lo que se hacia...
Muy entérica te enredas.

Murió en la guerra tu hombre;
quedose en la santa tierra,
ya no le queda ni el nombre...
No se, si pueden lo entierran.

Tan muerta en sus pecados;
muy enterrada se queda,
con cientos de hombres tarados...
Con poco pan y sin tierra.

Siendo la María tan puta;
y siendo de buena conciencia,
jadeando seguía sin ruta...
Muy cachonda y sin clemencia.

"Epilogo:

María "La Ponderá";
murió en un viejo camastro,
nadie le pudo achacar...
Que vivió vistiendo Santos".

"Guti".