"¿VALE LA PENA UNA AMISTAD PROHIBIDA?".

"UN GMAIL PARA UNA HERMOSA MUJER".

Ayer recibí tu carta;
con letras muy sinuosas,
como una guinda a una tarta...
Suave; más peligrosa.

Me declaras como "amigo";
cosa que ya estoy dudando,
¡y pongo a Dios por testigo!...
¿Porqué lo estás preguntando?.

Declaras tu admiración;
por lo que digo y aprecio,
y no prescribo el marrón...
Ese tóno de desprecio.

¿Sabes lo que yo te aprecio?;
para ti, no es nada nuevo,
¡no me llames más Prudencio...
¡No me toques más los "guevos""!.

Perdóname la expresión;
es que me sacas de quicio,
sólo quiero tu perdón...
Siendo tan malo ese oficio.

¿Amigo sin un mal roce?,
sólo un amigo del alma,
sin un beso, sin un goce...
Sin una noche en tu cama.

Tus respuestas prevalecen;
con insinuaciones raras,
son asuntos que merecen...
Y aguantar con mucha cara.

Te he escrito cosas bonitas;
y nunca la has desechado,
¿porqué ahora perjudican...
¡Ya me has puesto cabreado!.

¿Tienes marido o amante?;
o un gran amigo escogido,
o es que ha surgido al instante...
Desde que hemos reñido.

Yo nunca te pido nada;
sólo amistad pura y franca,
nunca he escrito marranadas...
Pero tu vas, y lo zanjas.

Mis recuerdos y mis palabras;
¿se las ha llevado el viento?,
tus respuestas descalabran...
Con tus malos sentimientos.

Aún recuerdo mis comienzos;
con los gmail enviados,
cuando admiré un buen lienzo...
Cuando te vi ni pintado.

¿Si has pérdido tu memoria?;
te aclararé el pensamiento,
no mangoneo esta historia...
Ni opongo tal sentimiento.

¿Recuerdas que te decia;
cuando admiraba tu cuadro?,
no decia que te quería...
¡Sólo esperaba un buen trato!.

He aquí este comienzo;
era un sentimiento puro,
perdóna si me entorpezco...
Con este gmail tan duro:

.- Eres tan linda y preciosa;
que no sabria que decirte,
sentada estás tan hermosa...
¡Y yo no suelo mentirte!.

No tapes esos ojos bellos;
¡quitate esa gafas negras!,
que quiero ver sus destellos...
De esos ojos que me alegran.

Ese cuerpo, esa cara,
con esas piernas de seda,
¿no se si te veo rara...
Con las olas que se enciegan.

Con muslos divinos y prietos,
con unos pechos potentes,
me metes en un aprieto...
Yo soy un tanto inocente.

Te salen muchos poetas;
todos con cosas bonitas,
uno suave, el otro aprieta...
Por ser linda y rebonita.

Otros predicen chorradas;
yo sólo digo verdades,
siendo tan bella y honrada...
Me meto en berengenales.

Nadie te mira a la cara;
van dirigidas a tus pechos,
dos monumentos sin taras...
Esos que miran al techo.

Esbeltos y sinuosos;
muy potentes y lascivos,
con sus pezones hermosos...
Son preciosos y reactivos.

El buen vino con sus años;
se aparea con mujeres,
a tu edad hacen más daño...
Son más buenas en sus quereres.


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¿Mira que eres hermosa?;
pareces un querubín,
tan bonita y tan preciosa...
¡No tengo más que decir!.

Rubia, morena o castaña,
serás igual de preciosa,
una mujer que no engaña...
Hueles igual que las rosas.

Tu fragancia y tu aroma;
tus andares elegantes,
siendo una linda paloma...
Te desean a cada instante".

Así comenzó el idilio;
sin amarres y sin codicia,
con alegria y sin litigios...
Sin besos y sin caricias.

Que te vaya bien preciosa;
cuidate y ves con tiento,
pués siendo linda y hermosa...
Te has vendido en poco tiempo.

¿Si alguna vez necesitas;
el apoyo de un amigo?,
que no vengan tus visitas...
¡Y no cuentes más conmigo!.

¡Has pérdido un gran amigo!.

Después de tan duro trance;
conocí a varias mujeres,
esperé que gobernacen...
En asuntos de quereres.

Morenas de fina estampa;
tan rabiosamente guapas,
alguna hasta se levanta...
Y se pegan como lapas.

Son habladurias de pueblo;
¿ya saben; por ser tan viejas?,
con ellas me encuentro cuerdo...
La otra era muy pelleja.

De la rubia, a las morenas,
de lo vasto, a lo elegante,
si la recuerdo es con pena...
Era muy extravagante.

¡Estas si que son amigas!;
con cuerpos tan fabulosos,
aunque alguna tiene migas...
¿Que me dicen; son hermosos?.

Trabajan como modelos;
pero tienen sus estudios,
la mia vive en Toledo...
Y no existe mi repudio.

Sus cuerpos son amorosos;
sus pechos fuertes y prietos,
con sus ojos tan preciosos...
Me han metido en un aprieto.

¿Que les voy a contar más;
si ya conocen mi historia?,
hablo francés y alemán...
Y con ella estoy en la gloria.

"Guti". "El romancero".