"UNA HISTORIA DESGRACIADA".
"Les presento a una mujer;
que es preciosa y generosa,
vive para el buen querer...
Porque es linda y muy preciosa:
Eres linda y hacendosa;
hermosura de mujer,
tan guapa y tan hermosa...
Con lozanía y candidez.
Tratas inútil de esconder;
con tu perfecta armonía,
con aroma de tu ser.
Porque me tienes manía.
Con secretos de mujer;
equitativa y constante;
yo no pueda merecer...
A soñadora y amante.
Ardiente y muy juvenil;
complaciente y muy distante,
en el momento feliz...
Y en el sitio más brillante.
Tu cuerpo de semidiosa;
y ha lo ancho muy perfecto,
a veces eres tediosa...
Tampoco yo soy concreto.
Eres con esculturales trazos,
con eróticos relieves,
que me abandono en tus brazos...
que por no querer no quieres...
La fragancia de tu esencia;
es aire de Primavera,
hay que tener la creencia...
Que el río tiene riberas.
Que frena escarcha y rocío;
con tu ardor y tu inocencia,
eres mujer de tronio...
Honrada y mucha decencia.
De brillante languidez;
recelosa en tus caricias,
en secretos de mujer...
Siendo siempre una delicia.
Es inútil de esconder;
tus ideas muy escondidas,
la avaricia de tu ser...
Son ideas muy recogidas.
larga melena Cortita;
siempre vistiendo de corto,
tu piel morena "chiquita"...
Con tus moldeados hombros.
Eres una maravilla;
apuesto en género humano.
todavía como chiquilla...
Que más bien parezco el malo.
Fuente de vida embrujada;
el refugio de inocentes,
extinta y desaguisada...
El mejor sitio decente.
Como una Diosa divina;
dulce monte de mujer,
que no tiene más cabida...
De un amor y de un querer.
De momentos memorables;
de un beso rojo y muy dulce,
con desafíos amables...
Comenzando con tres cruces.
Tus ojos como la noche;
con tu preciosa nariz,
un vestido sin sus broches...
Es cuando soy más feliz.
Con esas bonitas manos;
con esos dedos tan largos,
conquistas a los seres malos...
No lo recorto y lo alargo.
Eres como el pan moreno;
recién salido del horno,
como un precioso florero...
Que me sirve como adorno.
Como mi negra conciencia;
soñando bestialidades,
como humano sin decencia...
Teniendo necesidades.
Ya está harta de piropos;
y busca tranquilidad,
a mi ya me tiene loco...
Ya no me deja ni hablar.
El final ya se me acerca;
y el final de mi placer,
se ha convertido tan terca...
Que todo lo ve al revés.
Ha conocido otro hombre;
con sicopatía que embriaga,
también le va a dar su nombre...
¿¡¡Y lo cree la colegiala.
Es un mal hombre y consiente;
de que marche del camino,
para mi es muy indecente...
Pero ya importo un "comino".
Le deseo mucha suerte;
en un camino tan frío,
preferiría buena muerte...
Más lo intento y yo me río.
Hemos vivido un ensueño;
unos momentos divinos,
ella vivía sin un dueño...
Buenos años hemos vivido.
Así acabó mi historia;
con una bella doncella,
mujer que quería la gloria...
Y que pedía las estrellas.
Me enteré por un amigo;
que trabajaba en un antro,
mi amigo vino conmigo...
No era un bar ni un teatro.
Me dio pena el contemplar;
lo que quedaba sin quejas,
vieja ajada y sin hogar...
Con dos niños y sin pareja.
Los recogí en mi casa;
por lastima y mucha pena,
ella ya no tiene casta...
Y ha perdido su melena,
Pasaron seis meses largos;
los niños se mejoraron,
todos los gastos a mi cargo...
Y la moza se ha arreglado.
Ya le ha crecido su pelo;
un pelo que yo adoraba,
me abandonó como un perro...
Y aquí la tengo instalada.
Un anoche entró en mi cama;
y me habló de sus errores,
la oí con mucha calma...
Y me narró sus dolores.
Abandono y maltratada;
en su segundo embarazo,
muchos palos y despreciada...
Incluso le partió un brazo.
Al salir del hospital;
buscaba mi dirección,
desde aquel día me mudaba...
Y cambié de relación.
Han pasado cinco años;
arrepentida propuso,
no quería hacerme daño...
Sin trabajo y sin recursos.
Había engordado un poco;
pero era más mujer,
todavía estaba loco...
Por su amor y su querer.
Al año propuse un pacto;
adoptar a sus dos niños,
ella me aceptó tal trato...
Y me ofreció su cariño.
Quise olvidar su pasado;
ya cumplió cuarenta años,
yo estaba viejo y cansado...
Y no nos hacíamos daño.
Yo he cumplido los sesenta;
vivo feliz y contento,
los niños con su asistenta...
Han crecido que es portento.
No hay que guardar rencores;
el odio no suple nada,
el rencor da los dolores...
En un Alma inanimada.
"Guti". "El romancero".
"Les presento a una mujer;
que es preciosa y generosa,
vive para el buen querer...
Porque es linda y muy preciosa:
Eres linda y hacendosa;
hermosura de mujer,
tan guapa y tan hermosa...
Con lozanía y candidez.
Tratas inútil de esconder;
con tu perfecta armonía,
con aroma de tu ser.
Porque me tienes manía.
Con secretos de mujer;
equitativa y constante;
yo no pueda merecer...
A soñadora y amante.
Ardiente y muy juvenil;
complaciente y muy distante,
en el momento feliz...
Y en el sitio más brillante.
Tu cuerpo de semidiosa;
y ha lo ancho muy perfecto,
a veces eres tediosa...
Tampoco yo soy concreto.
Eres con esculturales trazos,
con eróticos relieves,
que me abandono en tus brazos...
que por no querer no quieres...
La fragancia de tu esencia;
es aire de Primavera,
hay que tener la creencia...
Que el río tiene riberas.
Que frena escarcha y rocío;
con tu ardor y tu inocencia,
eres mujer de tronio...
Honrada y mucha decencia.
De brillante languidez;
recelosa en tus caricias,
en secretos de mujer...
Siendo siempre una delicia.
Es inútil de esconder;
tus ideas muy escondidas,
la avaricia de tu ser...
Son ideas muy recogidas.
larga melena Cortita;
siempre vistiendo de corto,
tu piel morena "chiquita"...
Con tus moldeados hombros.
Eres una maravilla;
apuesto en género humano.
todavía como chiquilla...
Que más bien parezco el malo.
Fuente de vida embrujada;
el refugio de inocentes,
extinta y desaguisada...
El mejor sitio decente.
Como una Diosa divina;
dulce monte de mujer,
que no tiene más cabida...
De un amor y de un querer.
De momentos memorables;
de un beso rojo y muy dulce,
con desafíos amables...
Comenzando con tres cruces.
Tus ojos como la noche;
con tu preciosa nariz,
un vestido sin sus broches...
Es cuando soy más feliz.
Con esas bonitas manos;
con esos dedos tan largos,
conquistas a los seres malos...
No lo recorto y lo alargo.
Eres como el pan moreno;
recién salido del horno,
como un precioso florero...
Que me sirve como adorno.
Como mi negra conciencia;
soñando bestialidades,
como humano sin decencia...
Teniendo necesidades.
Ya está harta de piropos;
y busca tranquilidad,
a mi ya me tiene loco...
Ya no me deja ni hablar.
El final ya se me acerca;
y el final de mi placer,
se ha convertido tan terca...
Que todo lo ve al revés.
Ha conocido otro hombre;
con sicopatía que embriaga,
también le va a dar su nombre...
¿¡¡Y lo cree la colegiala.
Es un mal hombre y consiente;
de que marche del camino,
para mi es muy indecente...
Pero ya importo un "comino".
Le deseo mucha suerte;
en un camino tan frío,
preferiría buena muerte...
Más lo intento y yo me río.
Hemos vivido un ensueño;
unos momentos divinos,
ella vivía sin un dueño...
Buenos años hemos vivido.
Así acabó mi historia;
con una bella doncella,
mujer que quería la gloria...
Y que pedía las estrellas.
Me enteré por un amigo;
que trabajaba en un antro,
mi amigo vino conmigo...
No era un bar ni un teatro.
Me dio pena el contemplar;
lo que quedaba sin quejas,
vieja ajada y sin hogar...
Con dos niños y sin pareja.
Los recogí en mi casa;
por lastima y mucha pena,
ella ya no tiene casta...
Y ha perdido su melena,
Pasaron seis meses largos;
los niños se mejoraron,
todos los gastos a mi cargo...
Y la moza se ha arreglado.
Ya le ha crecido su pelo;
un pelo que yo adoraba,
me abandonó como un perro...
Y aquí la tengo instalada.
Un anoche entró en mi cama;
y me habló de sus errores,
la oí con mucha calma...
Y me narró sus dolores.
Abandono y maltratada;
en su segundo embarazo,
muchos palos y despreciada...
Incluso le partió un brazo.
Al salir del hospital;
buscaba mi dirección,
desde aquel día me mudaba...
Y cambié de relación.
Han pasado cinco años;
arrepentida propuso,
no quería hacerme daño...
Sin trabajo y sin recursos.
Había engordado un poco;
pero era más mujer,
todavía estaba loco...
Por su amor y su querer.
Al año propuse un pacto;
adoptar a sus dos niños,
ella me aceptó tal trato...
Y me ofreció su cariño.
Quise olvidar su pasado;
ya cumplió cuarenta años,
yo estaba viejo y cansado...
Y no nos hacíamos daño.
Yo he cumplido los sesenta;
vivo feliz y contento,
los niños con su asistenta...
Han crecido que es portento.
No hay que guardar rencores;
el odio no suple nada,
el rencor da los dolores...
En un Alma inanimada.
"Guti". "El romancero".
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