"NO ME FÍO DE LAS MUJERES".
Hoy ha brillado la luna;
con sus reflejos de plata,
con su verdor de aceituna...
Con caricias alteradas.
Las estrellas comandaba;
La moza miraba al cielo,
con las sombras de su cara...
Con admiración y celos.
Discreta y casta la luna;
entre pinos y los abetos,
con dudas y taciturna...
Con el corazón abierto.
Las paredes de la casa;
con el umbral en las sombras,
son los rayos que no alcanzan...
Ni a las flores ni a sus obras.
Callad; que la noche es bella,
le gemía su conciencia,
a través de las estrellas...
Derrotando su inocencia.
.- Estoy como poseída;
necesito un amor puro,
mi amor transcurre en mi vida...
Con su corazón tan duro.
Mi boca es un capullo;
mis labios son muy dulzones,
siento que mi cuerpo es suyo...
Tengo erguidos mis pezones.
Mis manos son dos palomas;
mi cuerpo el de un colibrí,
mis besos como amapolas...
Con caricias; soy feliz.
Trémulas carnes fogosas;
con su freno y su agonía,
siendo libre y tan hermosa...
Me robó hasta mi alegría.
Ya que su amor tendría.
al no ser tan mojigata,
pues de ese amor obtendría...
El placer y quedar harta.
.-¡Ni recatos ni vergüenza!;
¿dímelo que ya he logrado,
su placer, sin resistencia...
Bajo mi cuerpo gitano.
Me movía con el vaivén;
como se mueven las olas,
me encuentro feliz y bien...
Mi cuerpo airea su aroma.
"SEGUNDO ACTO:
Como una alegre amapola;
se movia en verdes trigales,
con el aire a todas horas...
Cuando cuentan sus verdades.
En esta mullida cama;
con las sábanas tan blancas,
mis nervios no están en calma...
Me hundo en sus partes blandas.
La noche es de pasiones;
dos cuerpos yacen desnudos,
son dos bellos corazones...
Era una amor bello y puro.
Pasemos al caballero;
que también cuenta en la historia,
un amante con dinero...
Con amargura y sin gloria:
.- Me levanté una mañana;
y vi su cama vacía,
con su ventanas cerradas
¡Creí que me moriría!.
Abandoné mi casona;
allí quedan mis recuerdos,
la casa quedó muy sola...
Aleteaban los cuervos.
Me fui a mi Andalucía;
tenia casa en mi Granada,
era grande y tan vacía...
Y mi cabeza anulada.
Conocí a una bella moza;
muy morena y muy gitana,
era fuerte y muy fogosa...
¡De Cadíz muy gaditana!
Sus formas eran muy finas;
era fuerte y orgullosa,
se llamaba Serafina...
Gitaneada y hermosa.
Su Padre era ganadero;
criaba y vendía ganado,
teniendo un tío hostelero...
¡Por Dios esta no ha engañado!.
Eran gente de Granada;
y pensé tranquilamente,
queriendo y acostumbraba,
Que era joven e inocente.
Más de tonterías nada;
lo primero, un bofetón,
.- ¡soy virgo y soy gitana,
Pero soy fuego y pasión.
Anduve el camino serio
al paso de mi caballo,
como un modesto arriero...
Seguía su yegua a mi bayo.
"TERCER ACTO:
Dejé que me adelantara:;
y me fije en su persona,
como una reina plantada...
Con zarzales de la zona.
Y al trote va por el monte;
leñadores con su tala,
van talando el desmonte...
Que padece salvajadas.
Al entrar en aquel valle;
di descanso a mi caballo,
recuerdo; y mejor que calle...
Los pensamientos que hallo.
Enjuagué el sudor tan frío;
que emanaba por mi rostro,
lastima que no haya un río...
O riachuelos de sollozos.
Son mujeres tan ansiosas;
sueltan tacos e improperios,
que otras más avariciosas...
Buscándose un gran imperio
Con imperio me refiero;
a viudos de postín
grandes tontos con dinero...
Y poca vida por vivir.
Serpientes muy venenosas;
sueltan fluidos con veneno,
son jóvenes tan viciosas...
Buscando a viejos mineros.
La vida guarda sorpresas;
y estos viejos con caudales,
guardan siempre en su despensa...
Más juventud, que reales.
¡Deja que se enfrié su cama!;
disfrutad las alquiladas,
dejad que crezcan las canas...
Las otras son ya sultanas.
Y aquí comienzo en Granada;
lugar de mi residencia,
una historia tan sagrada...
Que guardo con mi inocencia.
En la vega del Geníl;
la rodean blancas casas,
hay quinientas entre mil...
Con gentes de buena casta.
Sobre toda en una orilla;
se extiende gente muy rica,
son viejales de Sevilla...
Con mujeres muy ariscas.
"CUARTO ACTO:
Luciendo altivas palmeras;
con dátiles colorados,
varían con las higueras...
Cubriéndole el verde prado.
Los pinos con poco brillo;
en el valle son nogales,
ópalos tan amarillos...
En unas piedras reales.
Olmos que les piden pan;
por un hambre retrasada,
que me hacen recordar...
Las mujeres aliadas.
.- ¿Y tú quieres ser sultana?;
cazando un joven viudo,
por mucho que rías hermana...
Nunca me pondrías el yugo.
Yo te daría mi plata;
y estrellas, incluso la luna,
si no dieras tanta lata...
Tengo olivos de aceitunas.
La mar con su blanca espuma;
como adorno de tu frente,
mi casa llena de brumas...
Lo he pensado fríamente.
Ya tuve una historia rara;
al comienzo de este escrito,
como monja y mucha cara...
Me dejó por Jesucristo.
Se me asiló en un Convento;
como monja de clausura,
su cuerpo; un monumento...
Con su piel verde aceituna.
Las torres de mi mansión;
valen más que una persona,
existe una solución...
No quedarías nunca sola.
Lo digo en mi compañía;
suspirando en mis jardines,
con eso yo pensaría...
¡Que hueles a rosa y jazmines!.
La joven no vaciló;
y extendiendo suave el brazo,
duele un fuerte coscorrón...
Posteriormente un abrazo.
Y montada en buena yegua;
él montó en su caballo,
prometiendo más enmiendas..
Era hermosa; y me lo callo.
"Guti". "El romancero".
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