"HISTORIA TRISTE DE LA VIDA".

"LA AVENTURA DE UNA NOCHE".

La vida es una veleta;
va donde le empuja el viento,
unos cogen su maleta...
Pero dejan sentimientos.

Unos por aburrimiento;
otros son mas criminales,
estos lo llevan por dentro...
Son peores que animales.

No hay arrepentimiento;
surge el odio y el maltrato,
se enfrían los sentimientos...
Se pasan muy malos ratos.

Los sueños se desmoronan;
pero los recuerdos quedan,
¿entonces la vida es broma?...
Hay mujeres que se queman.

Soy consciente del recuerdo;
también de aquel abandono
nunca hubo un mal acuerdo...
Y en mi cabeza están todos.

En lóbrega soledad;
con instintos de doncella,
no encuentro tal claridad...
Ni por hermosa ni bella.

Relucientes las estrellas;
se vislumbran los luceros,
bebo anís de la botella...
Con la mezcla de romero.

Me planto frente al espejo;
cumplidos bien los cincuenta,
en mi cuerpo no hay pellejos...
Y me siento muy contenta.

Mis ánimos me sustentan;
refrescando mis sentidos,
vivo con muy poca renta...
Tengo el corazón herido.

Lo he amado y lo he querido;
trate de que no me hundiera,
todo broncas y berridos...
Siendo mujer de bandera.

Me sumerjo en la penumbra;
hay lágrimas en mis ojos,
mi cuerpo yace en la tumba...
Mis labios de grana y rojo.

Tantas veces le imploré;
entre agónicas palabras,
que pronto desesperé...
Al cerrar muy bien la aldaba.




"SEGUNDO ACTO:

Presentía que se acababa;
lo noto hasta mi inocencia,
yo lo quería y lo amaba...
Mostrándome su indecencia.

Hoy lloro sin su presencia;
sin su cuerpo sudoroso,
sus besos y mala conciencia...
Tan sutil; siendo orgulloso.

Mis gemidos no le alcanza;
ni mis abrazos y besos,
ya perdí hasta la esperanza...
Sentía sus manos en mis pechos

Molesta en mi rebeldía;
de mi boca se desprende,
¡maldito sea aquel día!...
Grita mi cuerpo rebelde.

Me olvido de mis razones;
me repugnó su linaje,
destrozas los corazones...
Con su físico y buen traje.

Se marcho de madrugada;
como un ladrón en la noche.
quede triste y amargada...
Oyendo el motor del coche.

Con un hueco doloroso;
que quedó en aquel cuarto,
y su olor tan oloroso...
Quedando su cuerpo harto.

Hablaba conmigo misma;
faltándome hasta su esencia,
es mi cuerpo que me vibra
Años; no esta su presencia.

Mi imagen en el espejo;
repito palabras viejas,
con un atuendo muy viejo...
Mirando grito mis quejas:

.- ¡Tu profanaste mi cuerpo!;
siendo virgen y muy honesta,
engañada y sin acuerdos...
Hoy me siento muy molesta.
 
Es mi odio el que despierta;
por ser ruin con su maltrato,
dejo la ventana abierta...
Quedo muda un buen rato.




"TERCER ACTO:

Lágrimas que he derramado;
por tal ausencia injuriosa,
su lejanía no ha mermado...
Aún soy linda y muy hermosa.

Vacía por dentro y por fuera;
llamándole con silencios,
despertando a mi manera...
Amargada y con desprecio.

El fruto de aquella noche;
me entrego luz a mi vida,
una noche de derroche...
¡Tan salvaje no se olvida!.

Han pasado treinta años;
su hijo con veintinueve,
lo miro y me hace daño...
Más mi dolor es muy breve.

Suaves caricias de antaño;
entre besos y sus juegos,
con aquel cruel desengaño...
Se iba apagando el fuego.

Aun recuerdo aquel apaño;
como si fuera el presente,
con sus embustes y engaños...
Siendo virgen e inocente.

Decreció mis esperanzas;
una aventura cualquiera,
de un amor que no se alcanza...
De una relación sincera.

Mis sentidos en la balanza;
sus besos sabían a gloria,
hay varones que se cansan...
¡Ya sé; se acabó la historia!.
 
Sus promesas como el viento;
cuando penetró mi rosa,
un negro presentimiento...
De virgen pase a gloriosa.

Si al menos él me hubiera dicho;
que mas tarde vendría a verme,
no quedaría en entredicho...
Un lunes y tampoco un viernes.

.- ¡Que no sufra si esta vivo!;
me entrego un gran tesoro,
y aunque yo ahora malvivo...
¡Su hijo es lo que yo adoro!.

¡No quiero plata ni oro!;
me siento sobre mi cama,
sin respetar mi decoro...
A mi me ahoga las ganas.
 
"Esta historia como todas;
de mujeres engañadas,
a un hotel o una casona...
Al poco tiempo preñadas".

"Guti"."El romancero".


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