.- Desde hace muchos años.
Las mujeres están perdidas.
El varón hace su apaño...
Ellas no tienen salidas.
Las casadas y prometidas.
Son violadas y castigadas.
La mitad medio vendidas...
La minoría asesinada.
Muchas son abandonadas.
Unas pocas se envenenan.
La Justicia no hace nada...
¡Otras se cortan las venas!.
¿Si la mujer tiene penas?.
Las guarda en su corazón.
Es infame esta condena...
Las suple con su pasión.
Ellas van con más razón.
Algunas pierden el norte.
Muchas tienen un bajón...
Otras viven con soporte
Hay caballeros con porte.
Y aparentan ser personas.
Otros muchos son consortes...
Son villanos de otras zonas.
Las minorías se entonan.
En su interior permanece.
Se vuelven más contestonas...
Ellas si que lo merecen.
Los sentimientos perecen.
Creando más desconsuelo.
Mejor que lloren y recen...
O perderán su consuelo.
Azul verdoso está el cielo.
La tormenta está completa.
Una moza con tres ciegos...
Con fornicación completa.
La inteligencia es concreta.
A tan primarias edades.
Son ilusiones que aprietan...
Donde claman las verdades.
Se anuncian calamidades.
Las guarda en su corazón.
Es infame esta condena...
Las suple con su pasión.
Ellas van con más razón.
Algunas pierden el norte.
Muchas tienen un bajón...
Otras viven con soporte
Hay caballeros con porte.
Y aparentan ser personas.
Otros muchos son consortes...
Son villanos de otras zonas.
Las minorías se entonan.
En su interior permanece.
Se vuelven más contestonas...
Ellas si que lo merecen.
Los sentimientos perecen.
Creando más desconsuelo.
Mejor que lloren y recen...
O perderán su consuelo.
Azul verdoso está el cielo.
La tormenta está completa.
Una moza con tres ciegos...
Con fornicación completa.
La inteligencia es concreta.
A tan primarias edades.
Son ilusiones que aprietan...
Donde claman las verdades.
Se anuncian calamidades.
Se exige en los caballeros.
Demandando cualidades...
Con su honradez comunero.
Se oyen llantos plañideros.
De mujeres engañadas.
Por rufianes y embusteros...
Porque no fueron amadas.
Demandando cualidades...
Con su honradez comunero.
Se oyen llantos plañideros.
De mujeres engañadas.
Por rufianes y embusteros...
Porque no fueron amadas.
Autor: Jesús Gutiérrez Pascual.- Guti.
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